Gloria Mendoza Borda

 


"Cualquier amanecer

                  no descartemos 

                  cualquier tarde

                  las cosas buenas

                  también suceden

                  en los atardeceres"

Catalina Bustamante


Bienvenida Gloria Mendoza a EL CLAROSCURO

Siempre es un privilegio abrazar tu alma.


                                                                                Fotografía de Jaidith Soto Caraballo


Gloria Mendoza Borda (Puno / Perú - 1948) Publicó 14 libros de poesía. Declarada por el Estado Peruano como Personaje Meritorio de la Cultura Peruana. En tiempos de pandemia dirige Tertulia Literaria Itinerante Internacional (2020 / 2021). El 2019 el poema La palabra en el equilibro de la vida de Gloria Mendoza Borda se difundieron en un programa I DICEN proyecto de profesores de la UNP y periodistas, en Canal 7 y anexos El 2019 fue invitada al Hay Festival de Arequipa a un conversatorio de TEJIENDO LAZOS EN LA AMÉRICA con el poeta  Garry Gottfritson (Canadá), el editor Sean Cranbury (Canadá) en la conversación  con Jorge Alejandro Vargas Participó en varios Festivales de poesía particularmente en el Festival Internacional El Lugar de los Escudos (México) dirigido por el poeta de Costa Rica Álvaro Mata Guillé, y Festival de Poesía de Nieva (Colombia). Es parte de los 100 autores iberoamericanos por Harold Alva FIP Primavera Poética 2020 y publicada en coordinación con la Municipalidad Provincial de Lima /Lima Lee. Este año salió su libro AMUSA (Ediciones Summa de Harold Alva)

**

Mamalluca y Mamá Herminía

En el observatorio de Mamalluca llovían astros
las estrellas se volvían palabras & las palabras se volvían pájaros
todos los expectantes se volvían rapsodas
la fuerza mágica de Mamalluca se parece a Gabriela
danza de manos sostienen suaves piedrecillas
bucea con luciérnagas en la lengua poeta del mar
desanda & vuelve a la montaña éxtasis en remolino eterno
entonces Huancané a lo lejos agitaba banderolas
tejía el viento aullando detrás del remolino del sur
incorporando esperanzas & sirenas seductoras
sobrevives madre Herminia aún a lo lejos

esta es la otra tierra que crece en mis bosques
pintada por mapuches & abre los brazos madre Herminia
nada más hermoso que la lluvia en las alturas
tenías que esperarme lejos con la piel convertida en rosa
me esperaste & la muerte te tomó en sus brazos para siempre
una caravana de wifalas del sur muchos relámpagos 
 
patria nuestra Latinoamérica nuestra yerba buena nunca muere
paja brava trigo multiplicado wifa wifa wifalá incrústate en el trigo
ensueña en los altos muros de Mamalluca enséñanos la ruta poeta
en el espectáculo paradisíaco de los viñedos
cuando los árboles frutales de Vicuña son las guitarras de la tarde.




En el curso de la vida

Bullicio de salvajes pájaros entre solemnes eucaliptos
y riachuelos

la poeta recorrió todos los caminos de la patria
aimaras & quechuas & campas
mil estrellas encendidas en las chozas

graznan salvajes patos cuando la ausencia es evidente
graznan salvajes patos porque la tarde se ha hechizado
con el informe de nuevas muertes
de jóvenes que no creen en la derrota
sino en música de grillos
cuando las hormigas abren los ojos más de la cuenta y se apoderan 
de todos los caminos de todos mis caminos

brutal impunidad brutal presagio de búhos
con la lluvia el poeta escapó hacia las cuevas
para escupir miel a los lagartos

dioses tutelares muerden frutales & la esperanza nunca muere
oh montaña de Mamalluca oh cielo andino abrumada entre las aguas
no la tomen prisionera no detengan sus pies es la viajera de monte arriba




Mamá Herminía se hizo agua

Los ríos se convirtieron en la entraña de mamá Herminia

brazos de olas traslúcidas alzaron poemas extraviados
en la corriente

en espuma afín memoria mamá Herminia se hizo catarata

entre mensajes sigilosos y aves negras oh muerte

río Sollata nos golpea nos recuerda nos envuelve
del agua salimos & el agua nos sigue golpeando entre las rocas.





Boca arriba la balsa

Están las imillas conduciendo las balsas
en la travesía el silencio es una golondrina extraviada

están los campesinos emparentándose
con los cielos & la muerte entre los vivos

nevado horizonte furia desesperanza
agonía de los desheredados
a pesar de todo
sois los dueños absolutos de las montañas

dueños del espacio sideral dueños de los árboles & los pájaros
dueños de la leche recién ordeñada & dueños del trigo
y la pureza de las flores.




Entre las altas montañas

Oh reverente montaña venero los bosques
el ensueño de los dueños del cielo azul

invoco tu vida oculta aunque no fluyas 
en la catarata que cae a mi música interior

en el huerto agitados árboles de naranjas
se niegan aceptar la muerte en las fosas sin nombre

en la cocina la tarde es aromada por el cacao       
que aún revienta por la rendija
de la ventana de la poesía

jóvenes reconstruyen la guerra
los cuerpos derramados son los cirios de la noche

desempolvando la miel de los balcones
asumo la dimensión de fuego
heredad de historia en lengua de las montañas
en lengua de río en lengua de poeta.




FRENTE AL MAR

Peregrinó 
el zumbido de los ataques
movimiento en el agua
vuestros nombres
exiliados eternos
cómo conciliar el sueño
fatiga enjambre
sobre las víctimas 
350 personas
otro día más de 400 personas
Señor de la Montaña
180 mil muertos
caminan entre tinieblas
de la memoria
nos miran cuando
absorbemos lo suyo
orfandad en mi país

la terraza es mi calle
le puse nombre
pasaje “Se prohíbe estar triste”
pero cómo querido Carlos
si la muerte se oculta 
en el follaje de bosques
a veces se mete al mar
danza de gaviotas libres
baile de lastimosos grullos albos
en los acantilados
los muertos
levantan las manos 
nos llaman
a modo de mareas clandestinas
caminan como crepúsculo
que tiembla abriendo la boca
miro con el rabillo del ojo
despoblado Malecón
tratando de consolar
espectros de las víctimas
James Ensor entre la multitud

una taza de café
& los libros recién llegados
en la mesa de la terraza
cruza un avestruz
pregunto por su silbido lastimero
examino el viento
¿se volverá a la normalidad?
la respuesta se vuelve granizada
sobrevivientes hasta cuándo
cerrojo en las puertas
silencio de perpetuidad
por los descalabrados en la penumbra
de guerra
no anunciada
un blando plástico negro
los cubre como ropaje
entonces tenías razón querido Carlos
doy golpes a mi corazón 
por esa carbonización sin sol
una y otra vez
para ver el retorno
de otro universo
mientras tanto
se cegarán las playas
como tú lo hacías ante el dolor querido Carlos
se hace imposible descomponer tus palabras
“se prohíbe estar triste” * el luto nos acecha.

*Carlos Oquendo de Amat




RAPADORA, SUMA KULLAKITA

Alzo el puño arqueado
las uñas rústicas águila infernal
calada por la lluvia que no se enturbie el mar
busco bosques tropicales Nicaragua
busco a la rapadora 
busco a la poeta
entre multitudes verano pomposo
corre el viento abre el paso
voy con mi mochila verde / busco a la heroína
ladra la muerte el oscurantismo el miedo poeta
quiero observar la larga cabellera de la rapadora
regalarle la Danza de las tijeras
de Ayacucho / quiero danzar en Nicaragua

poeta convertida en rapadora / amiga de Dora María
de jóvenes combatientes / Generala de la Casa Cuartel
ellos deben cuidar junto a los grillos 
simulando Guardia de Somoza
vencer / Dora María / única mujer en el Comando
Suma taikita munasnawa / munasnawa libre

Ortega
traicionó
no quiere dejar de incendiar el bosque, poeta.
Por esa orilla de mar frente al bosque
pido ser rapada y unirme a la causa aún bajo la lluvia.



ENTRE LA MULTITUD   

La vi
cerca
acullá
19 años niñachay
“hierba silvestre” *
al empezar los 80
prisionera, insurrecta
despliegue subversivo
llevada al juzgado
pálida flor de retama
lo más opuesto a una directriz
el olvido poeta, memoria atroz
los suyos la olvidaron
muchachita entregada con pasión
madrigal rojo en su lucha
líder emblemática
luego de un motín 
la mataron
fuerzas policiales subversivas
ciudad sitiada
uniformados de todos los colores
de todas las fuerzas
botas gruesas
enredaban las palabras
el susto / pavor en los escolares
nosotros rumiantes
épocas de oscurantismo
día del entierro
un solo color un solo cántico
todos con polos rojos
incluso los antisubversivos
decías
“serás mi bálsamo en mi tragedia”
adivinabas en el espejo
de la cárcel
volarán tu tumba

como cuervos en la noche, Ruth
la ciudad de los muertos vociferaba
¡Edith Edith Edith presente!
multitudinario entierro 
Plaza repleta
lápida dinamitada varias veces
pasaron los años la olvidaron 
joven aguerrida
te dejaron se fueron warmicita
muchos años después
convertida en tierra horneada
te vi en una cerámica
leí tu poesía 
soy una que te vio
desde la multitud
te dejaron, se fueron
de ella queda una cerámica de tiesto y su canto.
Huayño




CUANDO UN HIJO / HIJOS SE VAN 

Sentí esa música Taikita
esa danza
ese canto
esa voz
te dejaron, se fueron
se cerró el telón perdurable
de lo híbrido en la miel del maíz
terminó la ceremonia sobre humanismo
la única música es el silencio
te acompaña tu cítara
ya no esperes
migraron por el mundo Taikita
experiencia, enigma 
de sentirte como un aguacero
de palabras
la poesía
la pintura
el teatro
una aventura de riesgo, pintora Ruth

allí
se mezclan los cánticos con los muertos
miles de muertos
no cuenta la vida
quedaste con tu faldón fucsia
con tu trenza en un moño de diosa
en la corola de una flor
la miel del corazón
supe en el comienzo 
todo tiene un fin taykita
rompe el vocablo
ya no esperes
te escuchan
te miran por el ojo de águila
corre por la campiña 
más allá de lo trashumante
encuéntrate con las estrellas
en la desnudez del aislamiento 
río Maravillas
noche incierta
no hay nada que hacer
te dejaron, se fueron
hace años que estás muerta, madre Gume.



  
TE DEJARON, SE FUERON (1)

“La señora que pinté representa el olvido” 
* Ruth Pilar Ingalupe

Nos miras como no mirando tayka suma taikita
ya no es tiempo de latifundistas en nuestros pueblos
pasó la Revolución del 23 como corriendo
tus trenzas lo saben
en cada nudo hay muchas muertes
los que se tiraron al río Huancané
gritando “wala wala wala” bala bala bala
por las balas de los uniformados 1923
quedó ahorcada en un árbol Rita Puma
las guerreras no mueren nunca
somos el pueblo walawala pujante
tu pollera aroma a muña lo sabe
te reparamos cubierta por la furia de los cielos
cielo iracundo tu mirada
tacho vaporoso de salvia el atardecer
te dejaron
se fueron
viento violeta te sostiene para no caer
el despoblado nos azota lo delatan tus ojos
una mano toma la trenza para reprochar porqué
te miro solitaria tayka suma taykita
furia de rayos enceguecidos parten el pasado
alkamaris silban, miras, quieres llamarlos
vuelve al presente suma taykita*
los que te dejaron se reputan mistis 
no volverán
duelen los andes
ellos resisten como migrantes
abruptos bordes de las ciudades

te buscaremos con Ruth Pilar
detrás de la granizada
al pie del cerro
cerca a la laguna con patos gozosos
te abrazaremos como nunca
comeremos papitas chiary imilla*
dormiremos en tu choza
nos contarás historias
danzaremos las tres
eso que te gusta, zampoñadas
donde los cerros despierten sus abras
comunidad de Huinihui saltaremos como perdices las tres
serpentinas en el cuello, calzaremos tus ojotas suma taykita.

1 Ruth Pilar Ingalupe, estudió en la Escuela de Bellas Artes de Puno. Autora del cuadro de pintura.
2 madre en aimara
3 chiquilla negra



***




Comentarios

Entradas más populares de este blog

Winston Morales Chavarro

Pedro Yohandris Giraldo Sánchez

Angélica Vargas